viernes, 21 de agosto de 2015

Neotipo proyecto doctorado simulación

PROPULSIÓN DE VUELO
David Núñez Ruiz



¿Qué experiencia te gustaría vivir en esta vida, aunque sepas que es inconseguible? Un sueño o un deseo que la realidad no te podrá ofrecer. Eso es lo que uno busca cuando incursiona en la narrativa, ya sean novelas, películas o videojuegos. Si se logra la inmersión, durante un breve periodo tenemos la certeza de que acabamos de vivir una experiencia alterna; sin embargo, al mismo tiempo nos queda un dejo de tristeza de que nuestra vida nunca podrá ser así. En ese momento buscamos otro texto para obtener ese mismo resultado.
Ahora, ¿qué pasaría si pudiéramos manipular a nuestra mente de tal forma que ella creyera que sí ocurrieron las cosas y esa noción ficcional mutara en recuerdo? Hace un año y medio empecé a pensar de qué forma se podía concretar este planteamiento. La respuesta era un poco más obvia de lo que yo esperaba, no por ello más sencilla: por medio de narrativas digitales.
Desde hace tiempo trabajo en este proyecto de narrativa digital. Busco crear una novela que cumpla con las características y virtudes del género y, a la par, maximice las herramientas narrativas con las que permite contar el soporte digital. La novela hiperdigital, o neotipo, es una narración que busca que el lector experimente una vinculación radical de la realidad y la ficción por medio de estrategias, que más abajo describo, narrativas y multimediales. En este caso, la experiencia que quiero generar es la del viaje a la luna.
Como los avances de soporte son tan sencillos -no se necesitan altos grados de programación para poder crear una vinculación multimedia/transmedial y que el lector atraviese diferentes plataformas para convertirse en usuario[1]- el principal reto está en las decisiones narrativas, estructurales y de estilo, así como en su concreción. Los libros digitales que incluyen multimedia y decisión de los lectores conllevan una estrategia con más de 30 años, lo importante es vincular la realidad del usuario con la ficción digital por medio del texto escrito y la apropiación digital a partir del internet 3.0, o de las cosas.

Argumento
Como mencioné, la experiencia que quiero generar es el viaje a la luna. Para ello dividí la historia en cinco partes. En cada una hay episodios, cuyo número y extensión será acorde a la temática. El usuario, podrá leerlos sueltos, no de acuerdo a un orden previamente definido sino al momento que vive en su cotidianidad (ejemplo, el usuario elige qué desayuna el personaje, de acuerdo a su antojo culinario o si quiere ver la televisión, puede elegir que el personaje vea una película o serie de televisión, lo que vincula realidades y sirve para que el usuario siga las pautas dramáticas de la novela digital); no obstante, también habrán capítulos fijos que crearán una progresión del conflicto y de la historia.
Al principio, el protagonista (dependiendo de las decisiones de los usuarios es un hombre soltero o con pareja, que no tiene trabajo ni estudia o bien realiza un trabajo de oficina que detesta por un sueldo raquítico) vive una vida rutinaria que se equipara con la del lector. En esta primera temporada, la realidad del protagonista se ve alterada por dos elementos, conoce a Montserrat, una mujer hermosa con quien liga por internet, y Matías, su mejor amigo, le presenta a David quien está obsesionado con deportes extremos y el viaje espacial. Después de que las cosas no resultan con Montserrat, el protagonista se entera por medio de David de que hay una convocatoria para ciudadanos que quieran viajar al espacio, en símil al proyecto MarsOne[2].
Lo más importante en esta parte es que el usuario se entusiasme con el reto espacial y vincule las acciones del personaje con su cotidianeidad real para crear una identificación y vínculo entre realidades.[3]
En la segunda parte, el protagonista decide aplicar para ser astronauta. Al principio, lee un par de textos sobre la carrera espacial y decide transformar su cotidianeidad para enfocarse en el proyecto de ir a la luna. En este bloque se plantearán elementos como que el personaje se enamorará, obtendrá un mejor trabajo y descubrirá su pasión, con el fin de implantar la noción de que la realidad ficcional es más sugestiva que la real, como lo busca cualquier lector.
En la tercera parte empieza el programa espacial, el protagonista debe seguir el entrenamiento físico e intelectual de los astronautas, mismo que el usuario deberá replicar para poder ser aceptado en el próximo viaje, el único que habrá. Para ello, se vincularán actividades en la realidad cotidiana que le permitan al personaje alcanzar esos logros por medio de herramientas digitales que permiten medir las actividades físicas –correrá una distancia delimitada por podómetros satelitales- e intelectuales –leerá un texto sobre Sergei Korolev, el constructor ruso que sentó las bases de la carrera espacial- a la par que las realiza el personaje, así como estas tareas, necesarias para el neotipo, se les exigirán retos cada vez más demandantes.
La cuarta parta trata del viaje, desde que despega el cohete hasta que orbita la luna. Consciente de que las narraciones sobre viajes a la luna se han centrado en el despegue y el alunizaje, esta sección, la más extensa, relata los tres días rutinarios de los cosmonautas en su viaje por el espacio, lo que permitirá construir a los personajes y centrarse en el viaje y no en la acción conquistadora, con el fin de conformar la inmersión. Para ello se complementarán la descripción narrativa y el paisaje que atraviesa el personaje, con estrategias audiovisuales como videos, que son libres de derechos, de la Estación Espacial Internacional y metraje de la NASA.
En cada temporada hay un aumento progresivo de los elementos narrativos y digitales que buscan que el usuario se vincule más con la historia para que en la última, el alunizaje, sea un proceso completo de inmersión y simulación de experiencia. Por ello, la quinta parte es un texto breve, y sin elipsis, sobre la caminata lunar.

Justificación
Internet está creando un cambio de paradigma como no lo vivíamos hace quinientos años. No sólo porque se pueda distribuir el contenido de una forma veloz ni porque nos permite comunicarnos de manera más eficaz, más allá de las transformaciones[4] ontológicas que se están generando, sino porque las personas se están esforzando, cada día más, por vincular la realidad digital con la realidad real. De ahí parte el verdadero éxito de las redes sociales, como Facebook. Creo que la narrativa, el género inmersivo por excelencia, no se puede quedar atrás. Sobre este planteamiento, he meditado de qué forma se podría crear una narrativa digital de la experiencia.
Antes, quisiera aclarar que no busco el bovarismo ni complejo del Quijote, sino aprovechar que hoy en día, con la explosión de las redes sociales, la comunicación digital y el auge de medios inmersivos como la realidad virtual o los lentes inteligentes que buscan una vinculación por medio de dispositivos electrónicos, la gente está equiparando las dos realidades. Para ello, desarrolle una estrategia dividida en tres vertientes, el estilo de la narración, la estructura del texto y la vinculación por medio de soportes digitales.
El primer paso fue delimitar la forma en la que quería generar esa experiencia. En este caso es fundamental la implicación del lector, por lo que decidí que, además de que atraviese diferentes plataformas y se convierta en usuario, determinae el orden de la lectura y las acciones del personaje, no en el sentido de “Text Adventures” -los textos de aventuras de los años ochenta donde tú decidías sobre el personaje- sino buscando que el personaje viva lo que está haciendo usuario para crear un equiparamiento de realidades. Como J.G. Ballard declaró, en el prólogo a su novela Crash, “Vivimos dentro de una novela. Cada vez es menos necesario que el hombre invente un contenido ficticio. La ficción ya está ahí. La tarea del escritor es inventar la realidad.”. En Propulsión de vuelo deseo no reinventar realidades sino buscar que el lector habite la novela.
Una vez delimitada la relación con el lector, me centré en la estructura y las relaciones digitales, pues el tema ya estaba definido. Creo que los escritores digitales somos arquitectos no decoradores de interiores, es decir, las herramientas digitales deben tener una función narrativa no enriquecer los libros, como normalmente se han utilizado.
Los soportes digitales permiten crear un nuevo enfoque en el género narrativo. Pues con las implementaciones tecnológicas se generan nuevas materias estéticas. En la actualidad, el soporte hipertextual permite conformar una nueva disciplina artística que une diversas ramas del arte con elementos multimedia –videos, audio, textos literarios e informativos, imágenes e hipervínculos a otras plataformas como chats, redes sociales, uso de micrófono, cámara, GPS, elementos que interactúen con la pantalla táctil y vínculos metatextuales, entre otros− en torno de una narración.
Decidí la estructura en un símil con la televisión. Así como en los años sesenta el cine fue la gran influencia narrativa, creo que es el turno de la televisión por lo que pensé en una forma de vincularlas; con base en la experiencia de haber escrito guiones para televisión y de impartir clases de guion audiovisual en la UNAM, en la novela importé la estructura isabelina, de los cinco actos de un serial, con bloques subcapitulares.
Una de las transformaciones de la narrativa digital es en la forma en la que se concibe la escritura[5], no sólo en el sentido de la función del escritor sino en la receptividad de los lectores. Nunca la gente había leído tanto como en esta época, el problema como decía Roger Chartier es qué leen. Basta poner como ejemplo que en promedio la gente lee 35 cuartillas al día dispersadas en Facebook y Twitter.
Hay dos elementos que podemos obtener de ello: la necesidad vivencial de la escritura y la vinculación con el lector. Las dos ideas no son exclusivas de la narrativa digital, el hiperrealismo, con ausencia de rompimientos espacio-temporales, y que abogan por la inmediatez, viene de Sterne y su Tristam Shandy donde el personaje trató, sin éxito, de escribir a la par que vivía. El siguiente elemento lo intuyo a partir del uso de la segunda persona, en el estilo que Italo Calvino maximiza en Si una noche de invierno un viajero… para que el lector se sienta vinculado con el personaje; no desde la subjetividad sino desde la evocación de las acciones.
Una vez delimitada la trama, el estilo y la estructura, me centré en los personajes. En estrategias de comunicación digital lo primero que se debe delimitar es al receptor. En este caso, decidí que el usuario y el personaje tenían que compartir características por lo que debía segmentarlo en elementos claves para la búsqueda de lectores. Por ejemplo, pensé qué tipo de estructura emocional y psicológica debían tener los personajes y elegí dos sectores que en mi opinión corresponden a personas que se sienten muy insatisfechas por la forma en la que están desperdiciando su vida: los llamados ninis y los nombrados godínez. Dos bloques que, sin importar que estén de moda, lamentablemente no desaparecerán pues el sistema económico actual obliga a que se reproduzcan estos modelos. Ello nos da un rango sectorizado y con un alto porcentaje de lectores potenciales.
Los personajes secundarios tienen funciones definidas para crear situaciones y sensaciones en el protagonista: una mujer, como objeto de deseo, que motiva al protagonista, un amigo, que le infunde ciertas estrategias psicológicas y un conocido que lo impulsa para que participe en la carrera por ir a la luna.

Motivos
¿Por qué el viaje a la luna? Detrás de una trama siempre hay un motivo.
El tema ya lo había definido, mucho antes. La razón por delimitar esta idea no es el éxito de las películas espaciales ni la proyección de ir a Marte, sino dos elementos más importantes para mí. En primer lugar, busco generar una experiencia en el lector que sea imposible de obtener en la realidad vivencial. Lamentablemente nacimos cuatro décadas después de que el último hombre fue a la luna y faltan muchos años para el turismo espacial. En segundo plano, desde niño, mi sueño era ser astronauta.
Sobre este tema, ideé un relato de 50 cuartillas con el título de “Estudios para un cuento de ciencia ficción /ó/ 28 formas de observar una luna rusa”. El argumento versaba sobre el viaje a la luna y un apocalipsis nuclear. Al terminarlo, me di cuenta de que la historia desbordaba el relato; era un tema para un novela.
Escribir una novela verosímil sobre el viaje espacial conlleva reglas diferentes, o al menos de esa forma justifiqué dos viajes que hice, uno al Centro Espacial Kennedy, en Orlando, el lugar del que despegaban los cohetes rumbo al espacio, y uno más a White Sands, en Nuevo México, un desierto espectacular donde probaban los cohetes y llevaban a los astronautas a caminar sobre las dunas blancas para que se adaptaran al paisaje lunar. Además, completé la investigación sobre el viaje a la luna, el programa apollo, el proyecto soviético y decidí seguir el entrenamiento de un astronauta.
Concuerdo con el teórico Percy Lubbock en que la única ley del novelista es ser consistente con algún plan para seguir el principio que haya adaptado. Estoy terminando la escaleta capitular y pueden ver el avance de la primera parte en su versión digital http://neotipo.blogspot.mx/2015/04/propulsion-de-vuelo.html
Creo que es fundamental abordar, desde la narrativa, las mutaciones en el proceso creativo y los alcances de la obra a partir del soporte digital, pues las trasformaciones en la literatura digital seguirán avanzando a un ritmo acelerado.

Agradeciendo de antemano la atención y el tiempo que dediquen a analizar la pertinencia de mi solicitud, les envío un cordial saludo.


Calendarización tentativa del proyecto

Mes 1
·     Entrega de la primera parte, versión borrador.

Mes 2
·     Corrección y entrega de la primera parte.
·     Revisión de escaleta de la segunda parte.
·     Inicio de la redacción de la segunda parte.

Mes 3
·     Corrección de la primera parte, diseñada y aprobación para publicarla.
·     Continuar la redacción de la segunda parte.

Mes 4
·     Publicación de Propulsión de vuelo (I)
·     Entrega de la segunda parte.
·     Revisión de escaleta de la tercera parte.

Mes 5
·     Corrección de la segunda parte.
·     Inicio de la redacción de la tercera parte.

Mes 6
·     Continuar la redacción del tercer bloque.

Mes 7
·     Conclusión de la escritura de la tercera parte.
·     Revisión de escaleta de la cuarta parte
·     Supervisión de la segunda parte para su publicación digital

Mes 8
·     Entrega de la tercera parte.
·     Inicio de la escritura de la cuarta parte.
·     Corrección del tercer capítulo

Mes 9
·     Continuar la escritura de la cuarta parte.

Mes 10
·     Entrega de la cuarta parte.
·     Revisión de la escaleta de la quinta parte.

Mes 11
·     Corrección de la cuarta parte.
·     Escritura de la quinta parte, la más breve.

Mes 12
·     Corrección de la quinta parte.
·     Corrección final y entrega del neotipo “Propulsión de vuelo”.





[1] Con la literatura digital el lector/espectador/escucha pasivo adquiere una función activa como co-creador y se le nombra: usuario.
[2] MarsOne es un proyecto civil de origen holandés que busca llevar a cuatro humanos a Marte, en 2025, para conformar una colonia extraterrestre. Lo interesante es que, al ser un proyecto privado, la forma en la que se conseguirá el dinero será televisando tanto el entrenamiento como el viaje, en una suerte de Big brother espacial.   
[3] Como ejemplo, véase en la muestra de obra, el bloque III de este neotipo. http://neotipo.blogspot.mx/2015/04/propulsion-de-vuelo-parte-1-bloque-iii.html
[4] Si les interesa el tema, mi ensayo “Narrativas digitales: transformaciones en el proceso creativo, la textualidad y la participación del lector−usuario, a partir de medios digitales” está en http://neotipo.blogspot.mx/2015/03/narrativas-digitales-transformaciones.html
[5] En el proceso creativo digital, las fases están delimitadas en un orden diferente al narrativo lineal en: idea, estructura, historia, con escisión de personajes protagónicos (transformación fundamental que permite al usuario ser partícipe de la obra y concretar una simulación de experiencia, no de realidad como en la novela, lo que fomenta su participación activa) estilo, escritura, concreción de herramientas digitales, corrección, publicación primigenia, lectura, corrección externa, reescritura por parte de los usuarios.

jueves, 20 de agosto de 2015

Hipertexto - Proyecto doctorado

LIBROS EVOLUTIVOS

Libros evolutivos se basa en la libertad de elección de lectura a partir de la hipermedia, que se genera a través de la interconectividad y los nuevos soportes tecnológicos.
Desarrollé un portal donde habrá un relato conformado por diferentes episodios (de forma inicial serán 16 autores y 96 bloques capitulares de diferentes géneros y formatos), que los usuarios calificarán y, apoyados de un algoritmo genético, determinarán cuál es la versión óptima; así como podrán participar con textos propios que entrarían al conjunto de elecciones. El acomodo de los textos se generará a partir de un conjunto de reglas estructurales alimentadas al algoritmo junto con la interacción con los usuarios. De esta forma, buscamos pasar de la imposición lineal de la lectura a un proceso de recepción participativo, con el apoyo de los sistemas computacionales.
Inicialmente, bajo esta configuración existen cerca de cuatro mil millones posibles combinaciones*, cada una de las cuáles representa una posible lectura; conforme haya más lectores que funjan como co-creadores las posibilidades combinatorias aumentarán. Los receptores elegirán los relatos que consideren mejores y al final obtendremos los resultados óptimos de este sistema dinámico de hiperliteratura, libros que evolucionan a partir de los juicios estéticos de sus lectores.
Los fragmentos serán intercalados y estudiados a partir de algoritmos evolutivos, herramientas computacionales que buscan resolver problemas de optimización a través de mecanismos similares a los que se encuentran en el proceso de la evolución biológica. Utilizan los conceptos de herencia, selección natural, mutación y recombinación genética, entre otros, para generar diferentes soluciones a problemas con un espacio de búsqueda demasiado amplio para explorar exhaustivamente. Los algoritmos genéticos pertenecen a esta rama y requieren de dos cuestiones fundamentales: una representación genética de las soluciones posibles y una manera de evaluar su optimización. A partir de esto, el mecanismo busca generar mejores soluciones en cada iteración de su funcionamiento, donde el concepto de “qué tan bueno es algo”, o en su correcta definición, su aptitud, está dado completamente por la manera de evaluar que se haya definido inicialmente.
Los lectores calificarán los relatos generados y se convertirán así en una parte fundamental de la creación literaria.
De esta forma, concretamos la idea de que la multiplicidad de la escritura se da en la infinidad de lecturas posibles. No sólo un producto de muchas manos, sino ante todo un laberinto con miles de caminos, donde el lector obtenga el título de co-creador, no al escribir, sino al definir los bloques para obtener una pieza óptima.

*En un inicio y sin considerar las lecturas eliminadas por las reglas estructurales, se consideran 16 bloques iniciales y 16 bloques finales que tienen posiciones específicas, estos generan 256 posibilidades. Además, se puede elegir los otros 4 bloques entre 64 posibles bloques intermedios, las combinaciones de 4 en 64 resulta en 635,376 posibles secciones intermedias. Además se debe multiplicar este número por 4! = 24 pues el orden de los bloques es variable. Esto resulta en la siguiente ecuación:
El resultado preliminar es, con los bloques disponibles, de 3,903,750,144 lecturas diferentes. Para poner este número en perspectiva, si cada persona leyera un texto, se requeriría al 60% de la población mundial actual para explorar el espacio de búsqueda completo. La utilización de heurísticas nos permite encontrar soluciones óptimas con un número mucho menor de lecturas.
 
OBJETIVOS CUMPLIDOS
- Generar libros evolutivos, que permitan al usuario ser partícipe de la obra, elegir las subtramas, decidir y definir la secuencia de información y su jerarquización estética.
- Generar el algoritmo y la estructura literaria subyacente que especificará la validez de las recombinaciones y ayudará al grupo de lectores a explorar satisfactoriamente el inmenso universo de lecturas posibles, explorando solamente un conjunto de ellas.
- Desarrollar la plataforma para los Libros Evolutivos.
- Que 16 escritores conformen (en proceso) los 96 bloques capitulares en torno a un argumento flexible que conformen 64 variaciones intermedias más 16 inicios y 16 finales, mismos que la computadora mezclará para tener un resultado probabilístico de 4 bloques combinatorios.


FUNCIONAMIENTO
Aunque la multiplicidad de la escritura se da en la infinidad de lecturas posibles, ello no elimina la idea una historia matriz, por ello hemos conformado un argumento sobre el que se erigen los personajes y las historias, para que tenga una unidad lectiva.
A finales del siglo diecinueve, un tren atravesaba Brasil, deteniéndose en cada pueblo donde subía y bajaba gente. Lo peculiar era que la última estación era un psiquiátrico, por lo que un vagón estaba destinado a los pacientes del sanatorio. Sobre esta anécdota, se desarrollarán las tramas. Los personajes viajarán en este tren y los relatos se estructurarán en el viaje o en el proceso anterior o posterior al tren, con total libertad autoral.
Elegimos esta historia por razones que van más allá de la posibilidad de un relato múltiple. Decidimos utilizar una trama histórica para dar a los escritores la libertad de inventar o investigar; anacrónica en gesto irónico con la idea de lectura hipertextual, y en un país ajeno, para generar la idea de universalidad. Además, la vinculación entre locura y razón permite crear relatos realistas y fantásticos sin perder verosimilitud, uno de los elementos más importantes en la literatura digital. Y un tren, espacio en movimiento que rompe con la linealidad de la temporalidad.
En un inicio serán 16 autores y cada uno escribirá 6 bloques. Un planteamiento argumental, cuatro relatos intermedios y una resolución. Habrá 2 poetas, 6 narradores para adultos, 2 narradores para niños, 2 ensayistas, 2 guionistas, un dibujante, para elaborar una miniserie gráfica, y un diseñador. Decidimos incluir el comic gráfico que se vincula con el literario, por ello lo utilizamos como discurso narrativo.
Cada autor elegirá a cuatro de una tabla con 10 personajes preestablecidos. De base, los personajes compartirán cuatro elementos mínimos: nombre, edad, características físicas mínimas y finalidad ambigua (Ejemplo: Elena, 37 años, lunar en la mejilla y falda larga negra, viaja junto a una niña). La contradicción no es un conflicto, pues enriquece la lectura.
Además se irá conformando una lista de personajes incidentales, sobre ellos, los usuarios podrán crear historias alternas.
Los autores además elegirán el estilo entre todas sus modalidades: poesía, narrativa, ensayo, crónica, texto expositivo, argumentativo, dramático, etcétera; con sus variables (relato en 1a, 2da y 3era persona, en presente, pasado o futuro, etcétera) guion, ensayo histórico de ficción, hipertextos, entre otros. Para que se generen estos vínculos cromosómico, las historias fragmentadas serán breves, máximo tres cuartillas por historia, pues en la literatura novísima, es fundamental el lenguaje depurado que genera rapidez y levedad, así como su multiplicidad, permitiendo que el lector encuentre la unicidad y a la vez la totalidad.
Los autores tendrán tres meses, en proceso actual, para desarrollar sus historias, mientras tanto se conformará la plataforma digital con una clara orientación hacia el disfrute de la lectura y la interacción con y entre los usuarios. A la par, crearemos una estrategia de comunicación integral para publicitar en medios impresos y en redes sociales con el fin de que el proceso de lectura y colaboración de los usuarios sea masivo. Y, se conformará el algoritmo, el sistema computacional y la estructura.
El sistema computacional evolutivo tiene las siguientes etapas: Generación de contenidos, creación y ejecución del algoritmo genético y búsqueda-obtención de soluciones finales.
Durante la primera etapa se generan los fragmentos literarios y multimedia que fungirán como insumos o “material genético” al algoritmo. También se definirá la estructura literaria subyacente que especificará la validez de las recombinaciones y otras modificaciones que se puedan llevar a cabo durante la segunda etapa.
Las reglas estructurales definirán las limitantes que se exigirán de las lecturas generadas por el algoritmo genético. Por ejemplo, podría limitar a tres el número de bloques por el mismo autor (con el fin de que sea realmente una elección del lector y no sólo las propiedades estilísticas del autor) o exigir al menos dos bloques directamente relacionados al mismo personaje. En la generación de la estructura se buscan eliminar opciones intrascendentes del conjunto de soluciones, para reducir el espacio total de búsqueda y mejorar las capacidades heurísticas del algoritmo.
En la segunda etapa, el algoritmo generará, dada la estructura, una población de textos que serán entregados a los lectores. Los lectores evaluarán dichos textos a partir
de cuatro parámetros simples (Te gustó (apreciación estética), es clara la historia (ontológica), es el orden correcto (estructural) y lo recomiendas (puntuación general).) que servirán al algoritmo para realizar los cómputos requeridos antes de conformar la siguiente generación.
El algortimo tomará los parámetros de evaluación para calcular la probabilidad que cada texto tiene de ser reproducido en la siguiente generación. Utilizando estas probabilidades se generará el nuevo conjunto de fragmentos los cuáles serán recombinados en un nuevo conjunto de textos para entregar a los lectores. Este proceso continúa de la misma forma gestando nuevas generaciones hasta que se alcanzan parámetros de paro preestablecidos.
La tercera etapa contempla la observación y análisis de los textos resultantes y de sus aptitudes individuales. De estas observaciones se eligen los textos que serán el producto final del proceso, entre estos deben encontrarse los que hayan recibido las mejores calificaciones en la última generación ejecutada, puesto que éstos representan el elemento preferido por los lectores.
Una vez que se termine el proceso de lectura y calificación, realizaremos un análisis sobre el proceso de lectura y se desarrollarán tres libros digitales, que muestren el proceso lector, con puntuaciones óptimas, multigenéricas y negativas.

JUSTIFICACIÓN
A partir de la tecnología, el arte ha transgredido las fronteras para unificarse en disciplinas artísticas y de divertimento que trascienden los elementos intertextuales y generan nuevas disciplinas estéticas.
La utilización del cómputo evolutivo y, en particular, de los algoritmos genéticos ha probado obtener resultados enormemente satisfactorios en un sinnúmero de pruebas en múltiples áreas de investigación y desarrollo. A pesar de ello, estas herramientas no se han aplicado a la producción literaria.
La literatura digital permite transformar el proceso creativo con una estructura como laberintos multidisciplinares que vayan más allá del orden de la obra abierta que determina Umberto Eco pues con los mecanismos digitales, además de ser un libro múltiple con la posibilidad de ser interpretada de modos diversos, se logra que resulte alterada su “irreproducible singularidad”. Sobre esta vertiente, hemos decidido crear un soporte que nos permita posicionar al receptor como co-creador de la obra.  Además, este mecanismo permite maximizar elementos que conforman a los lectores de la actualidad.
Vivimos en una época de individualidad. Queremos decidir, queremos tener la voluntad para calificar el mundo que nos rodea, somos los que elegimos y buscamos, sobre todo, ser libres y originales, pero a la vez, en estas contradicciones de la posmodernidad, nunca nos había importado tanto la opinión de los demás ni habíamos tenido la oportunidad de valorar cada elemento, sobre nosotros mismos o los que nos rodean. El mejor ejemplo de ello es Facebook y su sistema de “likes”. No sólo importa el contenido, lo fundamental es la aprobación social.
A la par, con la velocidad de respuesta y la democracia tecnológica, las redes sociales y los buscadores han fomentado el compañerismo estético e ideológico, donde el sitio que tiene más seguidores se convierte, implícitamente, en la mejor opción. Este mecanismo resulta similar a la selección natural y el desarrollo evolutivo, en la que un individuo con mayor aptitud tiene mayores probabilidades de reproducirse.
La incorporación de los lectores al mecanismo de selección, aunado a la naturaleza aleatoria de la generación de soluciones, convierte este proceso, además de en una metaheurística de optimización, en un sistema complejo.
Para ello utilizamos un texto múltiple, fragmentario, abierto, simultáneo, con cientos de voces por descifrar, que expliquen igual número de mundos y que por medio del lenguaje, o en plural si deciden utilizar elementos multimedia, deben de unificarse en un relato globalizador.
La interacción de una computadora para definir las variables de un texto no son novedosas. En el ensayo de 1967, Cibernética y fantasmas. Apuntes sobre la narrativa como proceso combinatorio, Italo Calvino propone que el autor literario puede ser eliminado como sujeto y reducido a una serie de funciones que realizaría una máquina programada con un efecto combinatorio del lenguaje.
De igual forma, la idea de que los usuarios determinen la valía de un texto no es nuevo. El mundo digital se resguarda en este sentido. El mejor ejemplo de ello es Google, que a través de su democrático sistema PageRank, categoriza las páginas web, los enlaces e hipervínculos de acuerdo a los usuarios que acceden a ella y al valor de la página en sí, con lo que suben en el escalafón de búsqueda, hasta llegar al gusto o la aprobación general, como Wikipedia.
Tampoco es reciente la idea de que los lectores conformen la narración. Las wikinovelas se estructuran en torno a que un escritor propone un argumento o un primer capítulo y miles de manos desarrollan los siguientes. Esta mezcla de novela a varias manos y cadáver exquisito, tuvo una repercusión mayor cuando el novelista estadounidense John Updike, a petición de Amazon.com, escribió en la red el inicio y el final de Murder makes the magazine, los lectores la coescribieron durante un mes. O la wikinovela Hundred penguins, donde la editorial homónima permite que millones de lectores escriban -únicamente 250 caracteres por persona-, editen y conformen una novela monumental; la idea se ha desgajado en más de 50 personajes y varias novelas entrelazadas. Es importante hablar también de FanFiction, donde los lectores retoman elementos de historias preestablecidas para generar sus propios relatos.
Con todos estos elementos se buscan las laberínticas relaciones lectivas, un texto con innumerables caminos, un libro múltiple, abierto, con posibilidad de ser interpretado de modos diversos, donde el lector determine el camino más óptimo.          

CRONOGRAMA
 Periodo Actividades

Etapa 1 (Primer cuatrimestre)
-Escritura de los bloques capitulares por los dieciséis
autores iniciales.
- Creación del algoritmo y la estructura.
- Conformación de la página web y estrategia de
comunicación.

Etapa 2
- Lanzamiento de la aplicación.
- Publicitar en medios impresos y redes sociales.
- Lectura por los usuarios.

Etapa 3
 - Análisis de los datos obtenidos a partir de la lectura y participación activa de los usuarios.

miércoles, 5 de agosto de 2015

10 consejos para escribir

Antonio Orejudo :
"Mis 10 consejos –y uno extra– a un joven escritor"
(Apuntes sobre la conferencia inaugural del curso 2014/15 
del Máster en Creación Literaria de IDEC-Universitat Pompeu Fabra)
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1. NO ESCRIBAS. En el mundo existen ya muchos libros y éste no necesita otro más para seguir girando. Nuestro estado natural es leer. Así que lee –lee mucho– hasta que des con algo que te provoque el inevitable impulso de contarlo. Sólo entonces ponte a escribir.
2. HAZ DEPORTE. El escritor pasa muchas horas sentado frente al ordenador en soledad y es fácil que se rinda a la fatiga. Ejercita el cuerpo, mima la mente. Eso te ayudará a ganar en resistencia (física y mental), capacidad básica para el desarrollo del oficio.
3. DESOBEDECE. Cultiva cierta actitud infantil, gamberra, que te obligue a saltarte las normas de la escritura. Toquetea el texto en busca de formas nuevas. Pero ¡ojo! Únicamente tienen permiso para hacerlo quienes conocen las reglas. No juegues con ellas hasta que las domines.
4. CÁSTRATE. Un buen escritor no es quien escribe mucho, un buen escritor es quien tacha el texto sobrante. Pierde el miedo a ejercer contigo mismo de 'crítico castrante'. Elimina todos aquellos fragmentos de texto que sean superfluos en tus historias.
5. BORRA. El escritor es un artesano y, como tal, da forma a sus obras durante largas jornadas de trabajo. Llegará un momento –puedes estar seguro– en que deberás tirar a la basura parte de algunos de tus textos. No te lo tomes como un fastidio: piensa que es mucho peor publicar una cagada.
6. MEZCLA. El oficio de escribir es un arte solitario y puede que acabes cayendo a veces en el aburrimiento. Para que esto no suceda, toma los textos como si fueran un terreno de juego. Experimenta formas, mueve palabras, combina géneros. Tú pones los retos y decides cómo superarlos.
7. PIÉRDETE. Existen dos tipos de escritores: los que escriben a ciegas y los que lo hacen siguiendo un mapa. Tanto una como otra metodología de trabajo son válidas. Pero si te decides por ser de los primeros, deja que el fluir de la escritura te guíe por la historia.
8. NO TE MASTURBES. Nunca leas las críticas que terceros escriben sobre tus libros, ni te busques en Google para saber qué dicen de ti. Convierte tu espacio de trabajo en un iglú y aíslate del exterior. No dejes que las opiniones ajenas influyan en cómo será tu siguiente obra.
9. DEDÍCATE A OTRA COSA. El escritor es débil. Si sabe que tendrá el día entero para escribir, acabará por caer en la tentación de perder el tiempo (o en las redes, o con el 'mail', o leyendo los digitales). Cuando dejas que la escritura domine toda tu jornada, sí o sí, terminas procrastinando.
10. NO ESCRIBAS EL MISMO LIBRO. Algunos autores se pasan la vida escribiendo el mismo tipo de obra. El buen escritor, en cambio, prefiere seguir avanzando –de forma constante– en pro de 'la Gran Meta': la construcción de una voz literaria propia.
EXTRA. No sonrías nunca en la foto de la contracubierta de tus libros.

Visita el Blog Nostalgia de vuelo

Propulsión de vuelo es el neotipo (hipernarrativa) en el que he trabajado -primero de forma intermitente y ahora puntual- durante los últimos años. Como la hipernovela trata, entre otras cosas, sobre el viaje al espacio, en mi blog  Nostalgia de vuelo subí   videos, música, ideas, textos que he utilizado para documentarme y divertirme.
Toda la información que he utilzadoestá ahí, por si quieren revisarla.